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Ven, que te dé un verso: "Los abrazos tan anchos que no dimos", Ana Ilce Gómez.


Semana del 11 al 15 de noviembre
 
LOS ABRAZOS TAN ANCHOS QUE NO DIMOS

Hablo de los que aman
desde la cátedra simple
de su beso.
Los que se fían al amor
y no al destino
los que oponen sus sencillos
recuerdos a los graves olvidos.

Uno aprende de ellos
en calles-parques-guarderías
en mañanas tiernas o tardes
envejecidas.

Algo tenemos que aprender del cartero
muchas cosas desoladas o dulces
por ejemplo, cómo se guarda a través
de los años
con alguna nostalgia y no poca ternura
esa carta extraviada de amor
con corazones rotos garabateados
en los bordes
y puntos suspensivos como lágrimas.

La verdedora de ramitos ingenuos de reseda
algo tiene que darnos más allá
de la flor
más acá de su precaria sonrisa sin abonos.

En el ir y venir de la casa
a los suburbios  tremendos de la vida
vamos aprendiendo
cuánto dolor cuesta cosechar el trigo
cuánta alegría cosechar el trigo
cuánta sangre se cuela por el surco
que nos toca
cuántos frutos reclama la fatiga.

En el ir y venir de la casa
a los pedios tan lindos
de la vida
qué lecciones tremendas aprendemos,
el manojo de amor que postergamos
los abrazos tan anchos que no dimos
el sueño que esquivamos
todo está allí en perfecto orden
esperándonos.

Uno aprende de la mirada de otros
de la grave ternura de los otros
de los que aman con palabras sencillas
como un buenas tardes
como un buenos días
¡Pero buenos de veras!

Ana Ilce Gómez

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