Ir al contenido principal

Ven, que te dé un verso: "Tú querías que yo te dijera", Federico García Lorca

 

Tú querías que yo te dijera

 

Tú querías que yo te dijera

el secreto de la primavera.

 

Y yo soy para el secreto

lo mismo que es el abeto.

 

Árbol cuyos mil deditos

señalan mil caminitos.

 

Nunca te diré, amor mío,

por qué corre lento el río.

 

Pero pondré en mi voz estancada

el cielo ceniza de tu mirada.

 

¡Dame vueltas, morenita!

Ten cuidado con mis hojitas.

 

Dame más vueltas alrededor,

jugando a la noria del amor.

 

¡Ay! No puedo decirte, aunque quisiera,

el secreto de la primavera.

 

                                  Federico García Lorca

 

 

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

"Recuerdos de mi infancia enredados están". Poemas ganadores.

PRIMERA CATEGORÍA  Aquellos Días de mi niñez cuando me trataban de educar millones de historias inventé  y sobre todo: preguntas sin cesar. ¿Porque el techo es gris? ¿Porque es ahora azul? Esto se llama libro y se usa así ¿Que soy yo?,¿quien eres tu?  -De la Vida un aprendiz-   Joan Gómez Casanova, 2º ESO B Recuerdos de mi infancia enterrados están, en mi memoria se encuentran, no están en el desván. Cuales buenos eran los intentaré buscar, en mi mar de recuerdos, recuerdos serán. Recuerdos de mi infancia enterrados están, y ya sé donde buscar. En mi memoria y en fotos los voy a encontrar, los de mi infancia ya sé donde están, no están ni en un libro ni tampoco en el sofá. Cuales buenos eran encontrados están, mas los malos en mi memoria no se encontrarán, en fotos y en libros tal vez estarán, entonces ellos arderán, porque lo que pasó en el pasado allí se ha de quedar, en mi mar de recuerdos, recuerdos serán. Mis amigos y familia no sé si se acordarán, pero lo

Ven, que te dé un verso: Emily Dickinson, "Temo a la persona de pocas palabras".

Temo a la persona de pocas palabras. Temo a la persona silenciosa. Al sermoneador, lo puedo aguantar; Al charlatán, lo puedo entretener. Pero con quien cavila mientras el resto no deja de parlotear, con esta persona soy cautelosa. Temo que sea una gran persona. Emily Dickinson , El viento comenzó a mecer la hierba